Después de que varios grupos ambientalistas, incluyendo Alianza Mexicana contra el Fracking, CartoCrítica y Greenpeace, difundieran imágenes de un derrame de hidrocarburos en la Sonda de Campeche, Petróleos Mexicanos (Pemex) ha reconocido que se registraron “dos puntos de fuga” en un ducto de la plataforma Balam TA, ubicada en el campo de producción Ek Balam.

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Según los informes proporcionados por trabajadores petroleros y confirmados por Pemex, el derrame masivo de crudo y el incendio de la plataforma Nohoch Alfa Enlace no están relacionados, tal como señala el informe del Sistema de Rastreo de Eventos y Condiciones Inseguras de PEMEX Exploración y Producción (RECIO).

El combustible derramado proviene de la plataforma Balam TA, en el campo Ek Balam, perteneciente al Activo de Producción Cantarell de la Subdirección de Producción Región Marina Noreste, y según los trabajadores, aún se encuentran realizando trabajos para instalar una grapa pernada y/o abrazadera provisional en el ducto de óleo gasoducto I-146-A de 12 pulgadas.

Pemex, por su parte, emitió un comunicado en el que informa que el derrame fue reportado a la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente ASEA desde el pasado 6 de julio, asegurando que la fuga ha sido “totalmente reparada”.

La compañía petrolera enfatiza que este derrame de crudo no tiene ninguna relación con los incidentes ocurridos en la plataforma Nohoch Alfa, donde hubo una explosión el pasado 7 de julio.

Pemex también informó que la red de ductos en los campos de Ek Balam ha concluido su periodo de vida útil de 30 años y, como medida preventiva, se está llevando a cabo el cambio por una nueva red para eliminar definitivamente la posibilidad de futuras fugas de aceite.

La empresa asegura que los puntos de fuga en el ducto eran de pequeñas dimensiones, con fisuras de 7 centímetros de longitud por un milímetro de ancho y un poro de 1.2 centímetros de diámetro, lo que resultó en un volumen mínimo de hidrocarburos fugados. Pemex notificó de inmediato a la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA) y a la Secretaría de Marina (SEMAR), procediendo a la pronta reparación y control total de los puntos de fuga. La mayor parte del volumen derramado fue recuperado de manera inmediata y la mancha de aceite se disipó.

La empresa niega que el área afectada por la mancha de aceite sea de 400 kilómetros cuadrados, como se había mencionado previamente, y asegura que el volumen reportado por los especialistas de Pemex fue de 58 metros cuadrados (365 barriles de petróleo), afectando un área estimada de 0.06 kilómetros cuadrados, con un espesor de la película de aceite de aproximadamente un milímetro.

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