Se han descubierto residuos de plaguicidas en frutas y principalmente granos que se cosechan y consumen en Hopelchén, mismos que ponen en riesgo la vida humana, advirtió Octavio Gaspar Ramírez, miembro del Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco (Ciatej) sede Monterrey.

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El investigador de la Conacyt presentó su ponencia “Plaguicidas altamente peligrosos en alimentos de consumo local de Hopelchén” en el Primer Foro Peninsular, con el tema “Afectaciones a la salud humana por el uso de agrotóxicos en la región maya de Los Chenes”, que organizó el Colectivo de Comunidades Mayas de Los Chenes a través de la organización Much Kambal, A.C.

 

El investigador señaló que por primera vez se analizaron los plaguicidas en alimentos recolectados que se producen en Hopelchén, y detalló que se tomaron 26 muestras, de las que seis fueron de papaya, cuatro de chile habanero, cinco de maíz, cinco de tomate y seis de sandía, adquiridos en mercados y centros de producción de la región.

 

Tras la investigación y los análisis de laboratorio se encontraron residuos de plaguicidas identificados por muestras y de manera general, y se obtuvieron datos crudos y muy preocupantes.

 

En papaya fueron encontrados 47 residuos, en chile 29, en maíz cuatro, en tomate 32 y en sandía 27. Por eso alertó que preocupa la presencia de residuos de plaguicidas en alimentos y granos que se producen y consumen en Hopelchén.

Ningún plaguicida es amigable con el ambiente, explicó, y cuando son liberados para aplicar a diferentes cultivos, se dispersan por doquier a través del aire, y contaminan plantas, se incorporan a la cadena alimenticia y llegan al ser humano a través de la ingesta de suministros, se inhalan a través del aire o simplemente porque se trabaja directamente con ellos.

Lo preocupante, insistió, es que a cualquier ser humano al hacerle una muestra de sangre es casi seguro que tendrá al menos la presencia de un plaguicida. El 53 por ciento de los residuos de plaguicidas encontrados en frutas y granos en Hopelchén son altamente tóxicos y muy peligrosos.

Destacó que en México hay 183 plaguicidas altamente peligrosos que se usan en agricultura y campañas de salud como el combate al paludismo, jardinería e industrias, entre otras actividades.

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