Muy pocas parteras indígenas quedan en Campeche, manifestó el representante del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) en la entidad, Nehemías Chi Canché, quien expresó que el conocimiento de ellas es una herencia cultural que está en peligro, pues muchas han muerto y otras han adoptado conocimientos modernos.
Señaló que en el Gobierno de Felipe Calderón, en el sistema de salud, se modificó el protocolo de las parteras con conocimiento ancestral adaptándolo a la medicina moderna.
Destacó la precisión del trabajo de las mujeres peninsulares en el parto, el cuidado y la sapiencia a la hora de tratar a la madre y al hijo, “no se necesitaban cesáreas”, añadió.
“Al ajustarse esto a la medicina actual, todo lo que es tradición se hizo a un lado y ahora ellas debieron tomar cursos de capacitación para que realicen el trabajo a como lo hace una enfermera y un doctor”. Ello llevó a que se dejara a un lado el Programa de Parteras Empíricas, de ahí que ahora sean escasas las parteras tradicionales.
Y es que durante La Mañanera del Presidente de la República Andrés Manuel López Obrador se dio a conocer un proyecto de ley para proteger estos conocimientos ancestrales aunados a los de la herbolaria, con el objetivo de proteger el conocimiento ancestral y evitar su privatización, pues en algunos casos se ha patentado parte de estos saberes comunes.
De acuerdo con el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, el marco jurídico en México “es claramente insuficiente para proteger y promover a la partería tradicional”.
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Robledo destacó que las parteras están integradas desde hace 43 años en el proceso de atención al sistema del IMSS, conocido en su momento como IMSS-Coplamar, que hoy se incorpora al proyecto IMSS-Bienestar, con lo que se brinda ya atención en lenguas originarias con el apoyo de 754 médicos tradicionales, 6 mil 664 parteras rurales voluntarias y 15 mil 775 voluntarios rurales de la salud.
En Campeche, el sector salud tiene registradas 226 parteras, sin embargo, a decir del representante del INPI, en los pueblos del norte del estado, de origen maya, “ha de haber algunas cinco”.
Una de las parteras más grandes falleció recientemente en Dzitbalché.
El centro público de Conacyt coordina un trabajo con 180 parteras en 14 pueblos originarios y en Chiapas hasta el 47 por ciento de los partos son atendidos por expertas tradicionales.