En 2013, en una discoteca de Milán, Italia, Robinho fue sentenciado a nueve años de prisión por la violación de una mujer albanesa.
A pesar de la prohibición de extradición de ciudadanos brasileños en Brasil, los magistrados del Superior Tribunal de Justicia (STJ) están considerando si Robinho deberá cumplir su condena en ese país.
El STJ brasileño está recopilando pruebas que podrían respaldar la inocencia de Robinho y podría apelar la sentencia en Italia.
En una entrevista en TV Record el 17 de marzo, Robinho afirmó que fue condenado injustamente en Italia debido a su color de piel y aseguró que tiene pruebas que respaldan su inocencia.
Robinho sostiene que las relaciones sexuales fueron consensuadas y que nunca negó haberlas tenido con la presunta víctima.
Además, denunció la persistencia del racismo en Italia y sugirió que pudo ser víctima de ello durante su tiempo en el AC Milan en 2013.
El STJ emitirá su decisión el próximo 20 de marzo sobre si Robinho deberá cumplir su pena en Brasil o en Italia por el delito de violación.