Tras más de una década de impulso a la paridad de género en política, la presencia de mujeres en cargos públicos ha aumentado y el país podría tener en 2024 su primera Presidenta, pues las dos principales aspirantes son del género femenino.

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De acuerdo con un análisis de 24 HORAS, el mayor avance se ha dado a nivel municipal, pues en 2011 solo gobernaban 141 mujeres, mientras que este año hay 549 alcaldesas en 2 mil 475 ayuntamientos.

El porcentaje de mujeres que gobiernan municipios pasó de 6.9%, hace 12 años, a 22% hasta junio pasado, por lo que todavía no se alcanza la paridad en ese ámbito de Gobierno.

La reforma electoral de 2014 elevó a rango constitucional la paridad de género en el registro de candidaturas para todos los cargos públicos, desde síndicos y regidores hasta la Presidencia de la República.

Respecto a las 32 entidades del país, en la actualidad hay nueve gobernadoras en funciones, la mayoría de Morena, excepto por María Teresa Jiménez, quien gobierna Aguascalientes bajo las siglas del PAN.

En las próximas elecciones, a celebrarse el 2 de junio de 2024, estarán en juego nueve entidades y el Instituto Nacional Electoral (INE) impulsa un acuerdo para que en al menos cinco estados solo sean registradas mujeres.

De quedar firme dicho acuerdo, que actualmente enfrenta la resistencia de partidos políticos, el país asegurará que haya otras cinco mandatarias a partir de 2024, con lo que se llegará a 14 mujeres en ese cargo.

En 2011, en el país solo había una mandataria estatal en funciones: Ivonne Ortega, en Yucatán, y antes de esa fecha, en la historia del país, solo habían gobernado en 11 estados seis personas del género femenino, siendo entre 2006 y 2010 que hubo dos mujeres en ese cargo de manera simultánea.

Respecto a la composición del Congreso, las estadísticas oficiales indican que, en la Legislatura vigente en 2011, el Senado estaba dominado por hombres, con 96 escaños, mientras las mujeres ocupaban el 23.8% de la Cámara Alta, con 30 lugares.

En la Cámara de Diputados, en el mismo periodo, el total de curules era de 154 legisladoras.

A la fecha, se ha alcanzado el principio de paridad en ambas cámaras: en el Senado hay 126 escaños, de los cuales 63 son ocupados por mujeres y la misma cantidad por hombres.

A su vez, en la Cámara de Diputados, debido a cambios a lo largo de la Legislatura, los anexos del Quinto Informe de Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador señalan que se alcanzó la paridad, con 250 diputadas.

Respecto a la administración federal, con corte a junio había 1.5 millones de funcionarios, de los cuales 770 mil 615 eran servidoras públicas; es decir, la mayoría, con 51%.

A nivel de gabinete federal, en la actualidad México es parte de los 13 países del mundo con paridad en las secretarías federales, y entre los puestos de mayor relevancia está Luisa María Alcalde, de Gobernación, y Rosa Icela Rodríguez, encargada de Seguridad.

Además, a unas semanas de iniciar las campañas, Claudia Sheinbaum se perfila como la aspirante presidencial de Morena y aliados, mientras que Xóchitl Gálvez es lideresa del Frente Amplio por México, por lo que el año que viene se prevé que México tenga a su primera Presidenta de la República.

No es suficiente

El pasado miércoles, al dictar la conferencia magistral Participación política de las mujeres en las elecciones 2024, la consejera del Instituto Nacional Electoral (INE), Carla Humphrey Jordan, informó que el Índice Global de Brecha de Género 2022, del que México forma parte, estableció que se requerirán 132 años para que nuestro país logre la paridad sustantiva.

La consejera señaló que se necesitan medidas para garantizar que las mujeres ocupen espacios políticos, sin ser violentadas en su tránsito o en el ejercicio de sus cargos, de lo contrario “nos tardaremos mucho más en romper y acortar esa brecha”.

Aseveró que en el periodo 2015-2020 se han registrado 226 candidaturas para gubernaturas en México, de las cuales solamente 41 han correspondido a mujeres (18.14%) y 185 a hombres (81.86%).

Afirmó que “si bien hoy se cuenta con 10 gobernadoras, incluida una Jefa de Gobierno con licencia, se tendría que hacer la prueba específica de cuáles son los retos que han tenido, porque no es lo mismo paridad cuantitativa, que paridad cualitativa”.

Respecto a la paridad legislativa, apuntó que ahora “sería importante conocer qué hacen, qué comisiones presiden, qué posibilidades tienen de una injerencia importante; porque en el ámbito de las entidades federativas, 53% de las curules son ocupadas por mujeres y, sin embargo, cuando vemos en qué condiciones están, cuántas presiden una Junta de Coordinación Política o una Mesa Directiva y cuántas son coordinadoras de sus grupos parlamentarios, esos niveles se caen a casi el 18%”.

Hegemonía guinda sustituyó a la priista

En 12 años la composición política de México ha cambiado de fuerza, demostrando el poder que tiene la democracia para terminar con hegemonías tanto en gobiernos como en la conformación del Congreso.

En 2011, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) seguía ejerciendo su mayoría ante el resto de las fuerzas partidistas; lejos estaba de imaginar que a partir de 2015 un nuevo partido le quitaría el poder y los votos de los mexicanos.

Hace 12 años el PRI gobernaba 19 de los 32 estados del país; hoy sólo tiene dos estados, mientras que Morena, gobierna en 22 entidades.

En el Congreso de la Unión, en 2011 el PRI era el partido mayoritario en la Cámara de Diputados, con 229 legisladores y en el Senado tenía 32. Hoy tiene 201 diputados y 9 senadores.

“La composición política en estados, municipios, congresos, nos demuestra que vivimos una auténtica y real democracia; esto es gracias a que logramos conformar un Instituto Electoral autónomo, independiente con un padrón que se maneja de manera propia a través de esa autonomía y de esa independencia; con elecciones que cada día son más competidas y más reñidas en territorio”, refirió la senadora del PRI, Claudia Anaya.

En 2011 el Movimiento de Regeneración Nacional (ahora Morena) fue creado por Andrés Manuel López Obrador como una Asociación Civil, y en 2012 obtuvo su registro como partido político, lo que le permitió obtener 12 curules en la Cámara de Diputados.

A partir de ese momento el resto de las fuerzas políticas, particularmente el PRI, comenzó a perder la simpatía de los ciudadanos.

Así, en 2018 Morena ganó sus primeros tres estados, el PRI tenía 12 y el PAN 13; mientras que en el Congreso, el partido del Presidente logró la mayoría con 250 diputados y en el Senado alcanzó 61 escaños.

“Ha sido muy rápido su crecimiento y creo que también va a ser muy rápida a su caída porque como lo hacen tan mal, no creo que sea una fuerza que se mantenga por mucho tiempo”, declaró la senadora Anaya Mota.

Al respecto, el senador de Movimiento Ciudadano, Juan Zepeda, coincidió en que la caída de Morena será estrepitosa, “y tiene lógica porque su principal impulsor, Andrés Manuel López Obrador, es una hechura al 100 por ciento del sistema priista, entonces reeditó todas las malas prácticas y si bien su ascenso fue vertiginoso, su caída me parece que será igual”, declaró.

Ante ello, destacó que en 12 años también se han posicionado otras fuerzas políticas identificadas con los ciudadanos, como Movimiento Ciudadano (MC).

Dijo que en este cambio vertiginoso, los ciudadanos también se han politizado cada vez más y busca opciones distintas: “Con ese ocaso muy acelerado de un sistema hegemónico, con el empoderamiento de un nuevo orden político nacional que va por el mismo camino que el ciudadano repudió, los desencantos cada vez son más frecuentes y entonces el ciudadano empieza a ver otras opciones, porque lo repudió ya no lo va a reivindicar y en lo que confió le empieza a generar desconfianza”.

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