La firma de la manzana finalmente cedió y cambió el puerto de carga de sus equipos por una entrada universal conocida como USB-C para la nueva gama de iPhones.
Apple cede y se abre al puerto USB-C al presentar el iPhone 15
Tras la presión de Europa y luego de un año de haber sido obligado en aquella región del cambio, decidió unificar el cambio para todo el mundo.
Minuto a minuto lanzamiento del iPhone 15 de Apple
“USB-C se ha convertido en un estándar universalmente aceptado. Por eso estamos trayendo el USB-C al iPhone 15″, dijo Kaiann Drance, vicepresidente de marketing de iPhone en el evento de lanzamiento del último móvil de Apple ayer en los Estados Unidos.
Este no es el tipo de innovación tecnológica del que Apple presume, pero una ley de Bruselas obliga a los fabricantes de electrónica a equipar los nuevos teléfonos inteligentes, tabletas y cámaras con conector USB-C para finales de 2024.
“Ahora el mismo cable puede cargar tu Mac (computadora), tu iPad (tableta), tu iPhone e incluso tus AirPods pro (auriculares inalámbricos) de segunda generación”, agregó Drance.
“Si la batería de tus AirPods o la de tu Apple Watch (reloj) está demasiado baja, puedes cargarlos directamente desde tu iPhone”.
La empresa presentó cuatro versiones de su nuevo smartphone con, como cada año, pantallas más brillantes, lentes más sofisticadas y capacidades informáticas más avanzadas.
El modelo base, el iPhone 15, se comercializará desde 800 dólares, el mismo precio que el iPhone 14 presentado hace un año, habrá que esperar si al llegar a México se sostiene el precio en el país basado en 17 mil pesos mexicanos de entrada.
La incorporación del puerto USB-C es una pequeña revolución para el ecosistema de productos y servicios de Apple, difícil de integrar con otros sistemas gracias a puertos que utilizan tecnología exclusiva.
“Va a molestar a muchos usuarios de Apple (…) pero se acostumbrarán, no tendrán otra opción”, opinó Avi Greengart, de la consultora Techsponential.
Hace dos años, cuando se debatía el texto legislativo, la tecnológica californiana intentó oponerse.
La compañía argumentó que su tecnología “Lightning” se utilizaba en más de mil millones de dispositivos en el mundo y que la nueva normativa “ahogaría la innovación” y “perjudica a los consumidores”.
Para la Unión Europea, el objetivo es simplificar la vida y reducir la cantidad de residuos electrónicos que se generan a medida que los cargadores se quedan obsoletos.