José Escamilla, vecino de la zona desde hace más de 60 años, narró que la historia relata un enfrentamiento entre cristianos y moros (no creyentes), donde los diablos se encargan de hacer maldades.

“Los diablos son los que se encargan de hacer maldades, avientan agua, gritan, bailan y capturan al príncipe de los cristianos”, mencionó.

El habitante compartió que durante la historia se observa al príncipe de los cristianos que es atrapado por los moros; una vez encarcelado recibe la visita de la princesa de los moros, quien se enamora del príncipe y se convierte en cristiana. “La princesa lo visita y se enamora de él y por eso ella se vuelve cristiana”, señaló.

José Escamilla señaló que esta obra dura dos días, 6 y 7 de enero. Explicó que durante el primer día se enamoran la princesa y el príncipe y el segundo día se realiza la boda, donde al final se encierran a todos los diablitos y se encienden fuegos pirotécnicos.

En este sentido, Juan Cortés Mendoza, integrante de la obra, compartió que lleva más de 42 años de realizar el papel de Almirante Balán. Afirmó que este año se espera la visita de más de 2 mil personas. Mencionó que a diferencia de otras representaciones, ninguna es como la que se realiza en esta junta auxiliar.

“Esta es una historia y otros pueblos solo bailan, aquí la representamos y la relatamos para la gente, por eso la disfrutan”, aseguró.

Esta tradición se detuvo durante 2021 por la pandemia generada por el covid-19; sin embargo, este año los vecinos de la zona la retomaron, por lo que durante un recorrido se observó una amplia participación ciudadana quienes formaron un círculo alrededor de la obra.

Además, con motivo de la fiesta patronal también se instaló una pequeña feria cerca de la parroquia de San Baltazar Campeche donde instalaron puestos de diferentes antojitos como chalupas, tacos y cemitas, así como juegos mecánicos y canicas. Esta representación terminará este 7 de enero y se realizará en un horario de 11 a 21 horas.