Cuando se encontraron dentro de una vivienda en el Fraccionamiento Camaroneros, esta comenzó a incendiarse porque el menor de los niños jugaba a prender una montaña de ropa con un encendedor. Uno de los dos menores, que tenían cuatro y 14 años, estuvo a punto de morir por las quemaduras.
Alrededor de las 3:50 p. m. metro. Vecinos de la calle 66-A, entre 31-D y 31-C, en la demarcación indicada, llamaron ayer al número de emergencia para informar a las autoridades sobre un incendio que se estaba reportando. dos niños estaban presentes dentro de una casa.
Posteriormente llegó el Cuerpo de Bomberos Voluntarios, junto con Bomberos Tácticos y Protección Civil, quienes comenzaron a apagar las llamas con chorros de agua. Previo a la publicación de este informe, se había producido una importante movilización de elementos de la Policía Estatal Preventiva (PEP), quienes a su llegada dieron fe de lo que estaba ocurriendo.
Afortunadamente, los niños se mantuvieron a salvo y fueron retirados del interior de la casa, donde fueron descubiertos en una habitación que estaba en llamas. Sin embargo, minutos después, los tragadores de humo lograron apagar el fuego y evitar que se extendiera a otras partes de la casa, por lo que solo una habitación sufrió daños importantes.
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