Los pescadores ribereños de diversas localidades del estado de Campeche han expresado su profunda frustración y enojo ante el retraso en el pago de los apoyos correspondientes a la veda y la baja captura. Esta situación ha llevado a manifestaciones en las instalaciones del Instituto de Pesca de Campeche y en el Palacio de Gobierno, donde los pescadores han exigido a las autoridades responsables que cumplan con las fechas establecidas para estos pagos tan importantes para el sector.
Uno de los pescadores afectados, Juan Paat, residente del poblado de Lerma, relató cómo las autoridades les habían asegurado en reuniones anteriores que los apoyos se entregarían durante el primer trimestre del año debido a la veda electoral. Sin embargo, recientemente les informaron que dichos pagos se pospondrían hasta el 21 de mayo. Esta noticia causó un gran malestar entre los pescadores, quienes se sintieron desilusionados y traicionados por las autoridades.
“Por eso vinimos”, declaró Paat, “para obtener respuestas directas del Instituto de Pesca de Campeche o de la gobernadora. Queremos que nos aclaren por qué se ha retrasado el pago hasta mayo, especialmente cuando el Gobierno Federal había prometido que los depósitos comenzarían el 21 de febrero”. La falta de transparencia y claridad por parte de las autoridades ha generado una creciente sensación de desconfianza y descontento en la comunidad pesquera.
La falta de seriedad y compromiso por parte de las autoridades estatales ha sido duramente criticada por los pescadores. Paat lamentó que no se esté cumpliendo con los compromisos de entregar los apoyos en tiempo y forma, como se había hecho en ocasiones anteriores. Esta falta de cumplimiento ha motivado la organización y movilización de pescadores de diversas localidades, incluyendo Lerma, Villa Madero, Champotón, Seybaplaya, Camino Real, San Román y 7 de agosto, quienes se han unido en un frente común para expresar su inconformidad y exigir soluciones concretas a esta situación.
El retraso en el pago de los apoyos tiene graves consecuencias para los pescadores, ya que dependen de estos ingresos para subsistir, especialmente en un momento tan difícil como el actual. José Del Carmen Fernández, otro pescador afectado, señaló que la temporada de captura de pulpo ha sido pésima y que el mal tiempo ha paralizado aún más las actividades pesqueras. En este contexto, la entrega oportuna de los apoyos se vuelve aún más crucial para garantizar la supervivencia de las familias que dependen de la pesca como principal fuente de ingresos.
En resumen, el retraso en el pago de los apoyos ha desencadenado una serie de protestas y manifestaciones por parte de los pescadores ribereños de Campeche, quienes se sienten abandonados y desamparados por las autoridades responsables. La falta de transparencia, seriedad y compromiso por parte de las autoridades ha generado un clima de desconfianza y descontento en la comunidad pesquera, que exige respuestas y soluciones inmediatas a esta situación que afecta su sustento y bienestar económico.