El fentanilo, una droga sintética de extrema peligrosidad, ha emergido como una preocupante amenaza en el año 2024, especialmente en la Península de Yucatán. Según Sergio González Rubiera, portavoz de Vital, una organización dedicada a la salud y la prevención de adicciones, la entrada del fentanilo en esta región, junto con la infiltración del narcotráfico en escuelas preparatorias de destinos turísticos como Cancún y la Riviera Maya, plantea una seria alarma.
Se ha observado en algunas escuelas de Cancún que los estudiantes llevan drogas en sus mochilas, aunque no en la misma medida que el fentanilo, lo cual ha generado un clima de inquietud. Es preocupante que, incluso después de los esfuerzos de los operativos como el de Mochila, los estudiantes se las ingenien para ocultar estas sustancias, pasándose la voz entre ellos.
González Rubiera señala la gravedad del problema y la necesidad urgente de concienciar a través de conferencias y charlas, dado que aún no se cuenta con un Centro de Salud dedicado a esta problemática en la región. En el 2023, se registraron dos casos de consumo de fentanilo en Cancún y cuatro en Mérida, según datos del Centro de Integración Juvenil (CIJ) a nivel nacional. El fentanilo, por su naturaleza altamente adictiva y su accesibilidad económica, representa un riesgo significativo, especialmente al ser mezclado con marihuana, lo que potencia sus efectos y aumenta su atractivo entre los jóvenes buscadores de estupefacientes.
Tanto González Rubiera como Salvador González Gutiérrez, médico y consejero de Vital, enfatizan la importancia de no bajar la guardia ante el fentanilo, dado el potencial devastador que tiene en términos de pérdidas de vidas, no solo en Quintana Roo, sino en todo el país, siguiendo el preocupante ejemplo de lo que ocurre en Estados Unidos. Además, destacan el incremento en el consumo de metanfetaminas, particularmente cristal, entre jóvenes de 16 a 20 años, lo que subraya la necesidad de abordar el problema de las drogas desde una perspectiva integral.
Otro tema crucial abordado por los representantes de Vital es el preocupante aumento de los suicidios, una problemática que afecta especialmente a los menores en la Península de Yucatán. Desde el año 2020 hasta la fecha, se han registrado mil 150 casos de suicidio entre menores, una tendencia en alza tanto a nivel nacional como regional. La ansiedad y la depresión, agravadas por las secuelas de la pandemia, están afectando a un porcentaje significativo de adolescentes, lo que demanda una atención urgente y medidas preventivas adecuadas.