Un fuerte aguacero acompañado de tormentas eléctricas y vientos intensos, influenciados por diversos sistemas meteorológicos, incluyendo la onda tropical número 22, azotó diversas regiones del Estado ayer. En la capital, esta situación resultó en calles y avenidas inundadas, caídas de ramas, arrastre de vehículos e incluso motocicletas en áreas como Ciudad Concordia, junto con la obstrucción de drenajes debido a la acumulación de basura.

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La tarde trajo consigo la presencia del monzón mexicano, conjuntamente con una inestabilidad atmosférica en altitudes elevadas, un canal de baja presión sobre el sureste del país y la entrada de humedad procedente del Golfo de México y el Mar Caribe, además de la llegada de la onda tropical número 22 a la Península de Yucatán. La Comisión Nacional del Agua (Conagua) informó que se experimentaron precipitaciones puntuales de fuertes a intensas, sostenidas por más de una hora, lo que llevó a la acumulación de 75 a más de 150 milímetros de lluvia.

Avenidas prominentes, tales como Aviación, Gobernadores, Concordia, Miguel Alemán, Central, López Mateos, López Portillo, Siglo XXI y ciertas secciones de la Costera, quedaron sumergidas bajo el agua.

Lluvias dejan inundaciones en varios municipios de Campeche

En la avenida Maestros Campechanos, un individuo utilizó un machete para cortar un arbusto que cayó y bloqueó el camino, mientras que en el cruce entre Patricio Trueba y López Portillo, varios vehículos se encontraron varados.

La población compartió imágenes en las redes sociales que mostraban los estragos de la tormenta. En la calle 20 de Noviembre, las corrientes de agua provenientes de zonas más elevadas dificultaron enormemente el tráfico vehicular.

Una situación similar ocurrió en la calle 5 de Concordia, y una vez más, la zona de Flor de Limón quedó sumergida bajo el agua.

La lluvia provocó nuevamente el arrastre de basura, botellas de plástico, bolsas y ramas, lo cual obstruyó aún más los sistemas de drenaje, resultando en áreas con acumulaciones considerables de agua.

Además, se experimentaron interrupciones constantes en el suministro eléctrico.

En respuesta al torrencial aguacero, los equipos de Protección Civil del Ayuntamiento y del Gobierno del Estado se movilizaron para inspeccionar y retirar escombros, como ramas y basura.

Afortunadamente, no se informaron daños graves como resultado de esta situación.

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