El fenómeno social de la migración ha abierto muchos debates, más allá de la legalidad de las cuestiones económicas existe un enfoque más humanista que habla de la identidad y nosotros nos hemos dado cuenta que la familia es el elemento más importante de ésta, asegura uno de los directores de Home is somewhere else, Jorge Villalobos.
“La película habla de algo derivado de la migración, es cierto, sin embargo, quisimos emanciparnos de tocar el tema a partir de datos y cifras, quisimos cuestionar el papel de las familias que se crean a partir de este fenómeno y qué pasa con ellas cuando de pronto los niños se ven separados de sus padres de un día otro”, destacó el cineasta en entrevista con 24 HORAS.
Te recomendamos leer: Avala Corte amparo contra extinción del Fidecine
Home is somewhere else (mi hogar está en otra parte, por su traducción en español), relata los temores, esperanzas y sueños en torno a lo que significa crecer al interior de una familia sin papeles en Estados Unidos, todo esto a través de tres historias animadas contadas desde un perspectiva juvenil.
“Para nosotros era muy importante darle voz a los jóvenes; todos los protagonistas de las historias son chicos que acaban de salir de la preparatoria, que están en la universidad o que ya salieron, se nos hacía además de interesante, necesario contar cómo viven esta sacudida a su identidad, porque creemos que a los jóvenes pocas veces se les escucha en estos temas”, contó el también director de la cinta, Carlos Hagerman.
“Es importante ver a la cinta alejada de los lugares comunes como es el verla con ojos académicos, de denuncia social que a veces revictimiza a sus actores”, continuó el realizador.
La cinta abona a ver a la animación como un formato y no un género, un tema que recientemente ha destacado gracias a algunas películas de renombre que han puesto dicha cuestión bajo los reflectores.
“Inicialmente, nosotros no prestamos atención a esto, solo tuvimos la idea de hacerla animada porque creemos que es muy poético lo que se puede lograr con ello, los colores que usamos y hasta las mismas formas crean paisajes perfectamente cuidados y controlados que van en armonía con el discurso.
“Sin embargo, ahora que el tema ha vuelto a salir a la luz, es una forma de ver a la animación una vez más saliendo de lo que ha sido una zona de confort”, contó Villalobos.
Home is somewhere else viene de una gira de algunos festivales internacionales en donde ha tenido muy buena recepción.
“No estamos haciendo una campaña publicitaria de la cinta, lo que hacemos es una campaña de impacto y consiste en que tenga presentaciones estratégicas en foros que puedan hacer ruido con lo que les deja a sus espectadores.
Por si te lo perdiste: Pedro Páramo inicia producción
“En Turquía, un lugar muy alejado de Estados Unidos, la presentamos en una escuela preparatoria frente a jóvenes que yo considero no estaban poniendo mucha atención, sin embargo, en una ronda de preguntas, una niña se puso de pie y más allá de preguntar, quiso contar la historia de su vida, que estaba basada en la migración.
“Ahí nos dimos cuenta que más que reflexionar, la película invita a sentirla e identificarse con muchas personas que ya habían pensado lo que retratamos. Les damos voz”, concluyó Hagerman.