El deslizamiento de tierra ocurrido en la Carretera Federal 180, entre el Puente Zacatal y el Faro de Xicalango, fue causado por la tala excesiva e irresponsable de manglares en la zona. Estos manglares, que solían actuar como una barrera natural de protección contra los vientos del norte, ya no están presentes debido a la actividad humana.
Varios habitantes de la comunidad han afirmado que la deforestación de manglares ha causado grandes daños a la tierra cercana al mar, al mismo tiempo que la erosión ha afectado esas zonas.
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Según testimonios de los locales, unos 500 metros de playa han sido erosionados, pero lo más preocupante es que la sección de carretera pronto desaparecerá debido a la falta de manglares que solían protegerla. La deforestación ha provocado que incluso las barreras de piedra se pierdan gradualmente ante los eventos climáticos extremos como los “nortes”.
Ahora que los manglares que solían proteger la zona han sido talados, el agua del mar sigue erosionando la franja costera con tanta intensidad que las olas no se detienen. Como resultado, es probable que la carretera se derrumbe en un futuro cercano.
Finalmente, los vecinos declaran que la carretera ya está mostrando señales de daño debido a un posible socavón que se encuentra debajo del asfalto. En su estado actual, representa un peligro para los conductores de vehículos que circulan por la zona, especialmente para camiones grandes y pipas, que podrían volcar debido a las condiciones del terreno.