Analistas económicos coincidieron en que desde el último tramo de 2022 se empezaron a observar datos de desaceleración en el país, lo que se sostendría el Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) al descender 0.5% durante noviembre, de acuerdo a datos del Inegi presentados este miércoles.
Ven los analistas datos de contracción desde el 2022
Luego de una resiliencia durante los primeros nueve meses de 2022, economistas –y los datos– coinciden que para el último trimestre del año pasado hubo una moderación económica que se tendrá que confirmar con el dato de diciembre y lo que significaría que ya habría empezado una contracción en nuestro país.
El retroceso en noviembre de la actividad económica es el peor dato en 15 meses, por lo que desde una perspectiva trimestral, al dato le antecede un mes de octubre que no tuvo variación; y le precede una estimación de contracción de 0.4% para diciembre.
Omar Mejía, oficialmente pertenece a Banxico
Montserrat Aldave, economista principal de Casa Bolsa Finamex indicó que “en noviembre ya empezamos a ver signos de contracción en la economía y esto nos apunta a un cuarto trimestre del año muy débil y que además empieza a marcar esta tendencia de una desaceleración económica que tanto se espera para 2023”.
En ese mismo sentido, Grupo Financiero Monex en un reporte señaló que el dato de la actividad económica en el penúltimo mes de 2022, fue una mala noticia para la coyuntura económica local, ya que comienza a “derribarse la noción de resiliencia de la que había gozado el aparato productivo mexicano durante gran parte del año”.
Las mismas cifras del Inegi muestran que durante 2022 la actividad económica había registrado, en su mayoría, variaciones positivas a tasa mensual pese al entorno global de incertidumbre, incluso en abril sorprendió con un avance de 1.0%.
No obstante, para el último tramo del año pasado, los economistas señalan que fueron los elevados niveles de inflación los que habrían mermado en mayor medida la capacidad de compra de los mexicanos, una actividad que está incluida en el sector terciario, el cual representa casi dos terceras partes del PIB.
Para el mes de noviembre, la caída de la actividad económica se originó en el sector terciario –que comprende actividades de comercio y de servicios–, ya que se registró un retroceso mensual de 0.9%, sumando dos períodos consecutivos a la baja.
Y de manera desagregada, se observó que los subsectores del comercio al por menor y mayor, así como los servicios de alojamiento temporal y de preparación de alimentos y bebidas, se contrajeron pese a que en noviembre se llevó a cabo el “Buen Fin”.
Víctor Ceja, economista en jefe de Valmex explicó que el elevado nivel de inflación en noviembre, que se ubicó en 7.80%, afectó las decisiones de compra de los consumidores durante el referido evento comercial caracterizado por descuentos y adquisiciones anticipadas para Navidad y Fin de Año.
“Lo que vemos que se vio afectado fue por los niveles de inflación, hay que recordar que en el mes de noviembre, la inflación estaba más elevada que lo que está en la actualidad, y pues la gente tenía afectaciones en lo que su nivel de poder adquisitivo”, puntualizó.
El economista enfatizó que las actividades terciarias, es el sector que mayor peso tiene dentro del PIB, por lo cual se explica la contracción de la actividad económica a pesar de que el resto de los sectores no mostraron variación negativa.
Nearshoring compensaría efectos de recesión
Aunque para 2023 el consenso de analistas prevé un crecimiento económico inferior a lo previsto para el cierre de 2022, debido al riesgo de recesión mundial, los economistas coinciden que la relocalización de las cadenas globales de valor en nuestro país (nearshoring) será un elemento que compense los posibles efectos de un menor dinamismo.
“Hay dos factores que van a influir en el crecimiento en 2023. El primero es el riesgo de una desaceleración muy importante en la economía estadounidense donde es probable que en la segunda mitad de este año, se registre una ligera recesión y esto normalmente afecta a la economía mexicana, pero el nearshoring pues sí va a ser un factor de compensación que es muy importante”, dijo el economista en jefe de Valmex.
“Vemos al llamado nearshoring como una buena oportunidad para México. No creemos que esto lleve a México a un momentum de optimismo tan grande, pero sí creemos que le puede dar el impulso que quizá está perdiendo por el debilitamiento en la demanda externa”, coincidió Montserrat Aldave, economista principal de Casa Bolsa Finamex
Industria no reportó variación en noviembre
En el reporte mensual del Inegi de la actividad económica, se detalla que las actividades secundarias, referentes a la industria de la transformación (minería, construcción, manufactura, así como generación y suministro de energía eléctrica) no reportaron variación respecto al mes anterior.
En tanto, las actividades primarias, relacionadas con el sector agro, mostraron un incremento mensual de 5.3%, después de una caída de 2.7% registrada en octubre.