Irán perpetró la primera ejecución conocida vinculada con las protestas por la muerte de Mahsa Amini, al ahorcar a un hombre condenado por haber bloqueado una calle y herir a un miembro de la fuerza paramilitar Basij.
El país está sumido en una ola de protestas tras la muerte, el pasado 16 de septiembre, de una kurda iraní de 22 años fallecida tras ser arrestada por la Policía Moral, por vulnerar el código de indumentaria, que obliga a las mujeres a llevar velo.
“Mohsen Shekari, un alborotador que bloqueó el bulevar Sattar Khan el 25 de septiembre y apuñaló con un machete a un Basij, fue ejecutado el jueves por la mañana” en la capital iraní, indicó la agencia del poder judicial, Mizan Online.
El veredicto preliminar del caso fue emitido el 1 de noviembre por el tribunal revolucionario de Teherán y la Corte Suprema rechazó el recurso el 20 de noviembre, que llevó a la ejecución de la pena, añadió.
Las manifestaciones están encabezadas por mujeres, universitarios y alumnas, que retiraron su velo en público y corearon lemas contra el gobierno, enfrentándose directamente a las fuerzas de seguridad.
Las autoridades, que denuncian estos hechos como “disturbios”, acusan regularmente a Estados Unidos, sus aliados occidentales y a grupos kurdos en el extranjero de instigar este movimiento de protestas sin precedentes.
INHUMANOS
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Austria tachó la ejecución de “inhumana”, en tanto Alemania apuntó que “el desprecio por la humanidad no tiene límites”. Francia también expresó su “más firme condena” ante la ejecución.
Estados Unidos calificó como una “escalada nefasta” la primera ejecución en Irán de un manifestante por las protestas en curso y prometió que el régimen clerical rendirá cuentas.
Mientras que Alemania llamó este jueves a consultas al embajador de Irán tras la primera ejecución de un hombre implicado en las protestas que sacuden a la República Islámica, informó una fuente cercana al Ministerio de Relaciones Exteriores.
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MUERTOS
En un balance publicado el miércoles, IHR indicó que la represión de las protestas causó al menos 458 muertos, de los cuales, al menos 63 eran niños. El Consejo Supremo de Seguridad Nacional indicó el sábado que “más de 200 personas”, entre civiles y miembros de las fuerzas de seguridad, murieron en las protestas; mientras que un general de los Guardianes de la Revolución había dado cuenta previamente de un balance de más de 300 decesos.
Según la justicia iraní, más de 2 mil personas fueron imputadas. Al menos 28 personas, entre ellas tres menores, podrían ser ejecutadas en el país en relación con la movilización, afirmó el 2 de diciembre la oenegé Amnistía Internacional (AI), que también tachó de “farsa” los procesos a manifestantes.
Con información de 24 Horas Nacional
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