Cientos de activistas climáticos fueron detenidos el sábado después de irrumpir en el aeropuerto Schiphol de Ámsterdam, en Países Bajos, y ocupar durante varias horas una plataforma para jets privados, según presenció un corresponsal de AFP.
Los manifestantes, muchos con sudaderas blancas o chalecos reflectantes, entraron y corrieron hacia las pistas del aeropuerto alrededor de las 12H00 GMT. Luego, se sentaron frente a más de una docena de aviones privados estacionados en la plataforma para bloquear la salida de los aparatos. Algunos activistas se encadenaron a aviones.
Se estima que más de 500 manifestantes intentaron detener los aviones privados. Algunos recorrieron el sitio en bicicleta.
Los manifestantes dijeron que al menos un piloto abandonó su avión y regresó al hangar ante la imposibilidad de salir.
En la protesta, organizada por grupos de activismo medioambiental como Greenpeace y Extinction Rebellion, los activistas también usaron bicicletas y lanzaron eslóganes como “Abajo el volar” y “Contaminador ambiental de Schiphol”, ante los aplausos de los espectadores al otro lado de la cerca.
“Esta acción de hoy trata de que el aeropuerto de Schiphol debe reducir sus emisiones”, dijo la portavoz de Greenpeace, Faiza Oulahsen.
“Comenzamos con esos vuelos que no necesitamos en absoluto, como jets privados y vuelos cortos”, dijo a la AFP.
Tres horas después del inicio de la protesta, la policía fronteriza holandesa comenzó a arrestar a activistas, algunos de los cuales fueron arrastrados tras resistirse pasivamente a la detención.
Algunas imagines muestran a policías y activistas en bicicleta tratando de alcanzar y huir respectivamente. También se vio a la policía fronteriza tirando al suelo a varios que intentaban escapar.
Los manifestantes fueron llevados a oficinas de la policía fronteriza alrededor del aeródromo para ser procesados e identificados, dijo a la AFP el portavoz de la policía fronteriza holandesa, el mayor Robert van Kapel.
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Greenpeace consideró más tarde que la policía había sido “demasiado dura con activistas en bicicletas” e informó que al menos una persona resultó herida en la cabeza.
Por su parte, la alcaldesa Marianne Schuurmans de Haarlemmermeer, que incluye a Schiphol, criticó la protesta ante la ANP. “Esto no tiene nada que ver con la manifestación acordada. Esta acción es prohibida, peligrosa y punible”.
Esta protesta se produce en la víspera de la COP27, la cumbre climática de la ONU, que comienza en Egipto el domingo y que, según los activistas, también debería centrarse en los aviones por ser “los mayores contaminantes del planeta”, según Extinction Rebellion.
Indignación en aeropuerto
La EBAA, la asociación comercial europea del sector de vuelos corporativos, está indignada por la acción. El portavoz, aseguro que la gente suele pensar en los jets privados como “los ricos y famosos que quieren ir a Ibiza”, pero señaló que los vuelos médicos y las repatriaciones son gran parte de su trabajo, entre otras cosas.
Tambien aseguro que gracias a los activistas, se tuvo que desviar un vuelo sanitario. “Por lo tanto, encontramos esta acción inaceptable”, dijo Román Kok, portavoz de la EBAA.
Con información de 24 Horas Nacional
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