La Iglesia Católica desarrolló la marcha por la paz, en la que pidieron basta a la ola de violencia que enfrenta el país, y donde mediante oración confían que sanen los corazones a quienes les fue arrebatada la tranquilidad por hechos delictivos.
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José Francisco Verdejo Aguilera, vocero del Decanato de la Iglesia Católica, señaló que se deben buscar mecanismos para que quienes son responsables encuentren la cercanía con Dios, independientemente de tener en cuenta que sólo el trabajo en equipo, entre sociedad y autoridades, permitirá ponerle fin al entorno violento que se vive.
Alrededor de las 11 de la mañana de ayer, la Iglesia Católica convocó a los feligreses a participar en la marcha, en respuesta a la enmienda realizada por el obispo de Campeche, José Francisco González González, debido al sufrimiento que ha provocado la inseguridad y la violencia en el país, en nuestro Estado y ciudad.
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Los fieles católicos acudieron vestidos de blanco, con pañoletas y globos para participar en ese encuentro.
“Se están presentando secuestros, asesinatos, maltrato de muchas personas, es momento para decir ya basta, pero también es una forma pacífica de pedirle a Dios en oración, de que interceda por todas esas personas que sufren en su corazón y aquellos que han sido motivos por la cual se pierde la paz de muchas familias, que sean convertidos al corazón del Señor”, dijo Verdejo Aguilera.
Sobre la solicitud a las autoridades para mejorar las estrategias que impidan que se sigan presentando hechos delictivos que roben la paz y la tranquilidad en la ciudadanía, el vocero del Decanato dijo que como sociedad se debe trabajar en equipo, de lo contrario si los esfuerzos se hacen por separado, es más probable que no se llegue al objetivo.
La marcha que se realizó por el malecón del centro concluyó en el Santuario Mariano Diocesano de Nuestra Señora del Carmen, donde se desarrolló una celebración religiosa, que tuvo la participación de decenas de feligreses que pidieron por la paz.