Este 2 de marzo es miércoles de ceniza, y con ello inicia una de las celebraciones más importantes del calendario litúrgico del catolicismo. Aquí los detalles.
Desde temprano hora miles de mexicanos en todo el país se han presentado a las iglesias para, además de escuchar misa, recibir la imposición de la cruz de ceniza.
Marca que no solo simboliza la humildad del feligrés ante su credo, sino también una época de ayuno y recogimiento.
La práctica de la Cuaresma se remonta a finales del siglo II durante el imperio romano cuando aún el cristianismo era un credo proscrito por las leyes de la época.
En sí la Cuaresma es el tiempo destinado a la preparación espiritual previo a la Pascua en un lapso de 40 días.
La Pascua es la fiesta central del cristianismo y marca el final de la Semana Santa, en la que se conmemora la muerte y resurrección de Jesús, según el catolicismo.
Se llama Cuaresma porque refiere a los 40 días que pasó Jesús en el desierto previo a asumir su misión como profeta; también recuerda los 40 años que vagó el pueblo judío por el desierto tras salir de Egipto.
Esta celebración católica-cristiana (anglicanos, protestantes, evangélicos y entre otros) consiste en abstenerse de comer carne, estar en constante oración y alejarse de las celebraciones mundanas.
La Cuaresma abarca seis domingos, incluyendo el Domingo de Ramos, el último de la Cuaresma.
En el Domingo de Ramos los fieles conmemoran la entrada de Jesús a Jerusalén, lo que da inicio a la Semana Santa.
Es de señalar que el miércoles de ceniza no tiene una fecha fija en el calendario regular, por lo que cada año se modifica.
En este día los creyentes ayunan, van a la iglesia y se les coloca una cruz de ceniza en la frente; mientras que los católicos pueden lavarla o limpiarla en función de sus actividades diarias, los fieles ortodoxos deben dejarla desaparecer por sí sola.
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Las cenizas provienen de los ramos que se usaron el año anterior y de ornamentos viejos.
La cruz de ceniza representa el pacto con la fe y recuerda a los que la practican que algún día morirán y que el cuerpo se convertirá en polvo, «polvo eres y en polvo te convertirás«.
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