El ambiente en el lugar emana un olor insoportable, lo cual es percibido por los clientes que prefieren no consumir alimentos en su interior
Los comerciantes del mercado municipal Pedro Sainz de Baranda se enfrentan diariamente a dificultades para mantener sus ventas, ya que el deterioro de las instalaciones ha provocado una disminución en la afluencia de consumidores.
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“Años tienen que no lo arreglan, por eso la gente prefiere ir a los supers”, “da vergüenza ir a trabajar falta mucho mantenimiento”, “visitantes de otros estados critican mal aspecto”, fueron algunas de las declaraciones de los comerciantes respecto a los daños que se pueden apreciar en las estructuras.
Además, varios residentes de Campeche se sumaron a estas quejas para denunciar que incluso los baños del mercado no cumplen con las normas de higiene. Se reporta escasez de agua, muchos cubículos están fuera de servicio y los pasillos están encharcados de lodo. También se observa deterioro en los techos, que presentan filtraciones y están en proceso de deterioro.
Ante esta situación evidente de abandono, el sector comercial solicita con urgencia su intervención para llevar a cabo la rehabilitación de las instalaciones. Esta situación está perjudicando sus ingresos, ya que los clientes optan por acudir a otros establecimientos para realizar sus compras.
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Al interior del edificio se pudo evidenciar las condiciones extremadamente deficientes en las que se encuentra, ya que desde su construcción no ha recibido ningún tipo de mantenimiento, y los locales se encuentran en estado de ruina y abandono.