Un llamado urgente al cese de combates en la planta Zaporiyia, la más grande de Europa, pidió el jefe del organismo de control nuclear de la ONU, Rafael Grossi, al expresar que “quien esté detrás de todo esto debe detenerse de inmediato”, pues “¡Están jugando con fuego!”.
Alrededor de la planta se suscitaban ataques constantes los cuales cesaron por un tiempo, sin embargo, resurgieron este fin de semana por lo que el ejército ruso acusó a los ucranianos de bombardear el área que controlan. Se escucharon más de una docena de poderosas explosiones desde el sábado por la noche.
Te puede interesar: ONU exigirá a Rusia pagar reparaciones de guerra a Ucrania
Algunas de las explosiones fueron presenciadas por supervisores de la Agencia Internacional de Energía Atómica (OIEA), cuyo equipo dijo se registraron daños en edificios, sistemas y equipos en la zona, pero nada “crítico para la seguridad nuclear”. No se reportaron víctimas.
“Las noticias de nuestro equipo ayer y esta mañana son extremadamente perturbadoras”, dijo Grossi. “Ocurrieron explosiones en la zona de esta importante planta de energía nuclear, lo cual es completamente inaceptable”, agregó.
Grossi pidió una vez más a las dos partes en conflicto que acuerden e implementen una zona de seguridad y protección nuclear alrededor de la planta lo antes posible.
Puedes leer: ONU pide a República Dominicana no expulsar a haitianos
“No me rendiré hasta que esta zona (de seguridad) se haya convertido en una realidad”, dijo. “Como demuestra el aparente bombardeo en curso, se necesita más que nunca”.
Los medios estatales rusos citaron a un funcionario del operador de energía nuclear ruso Rosenergoatom diciendo que se habían disparado 15 proyectiles contra la planta que cayeron cerca de una instalación de almacenamiento de desechos nucleares secos y un edificio que alberga combustible nuclear gastado fresco, pero no se detectaron emisiones radiactivas.
La planta fue invadida por las fuerzas rusas unas semanas después de que Moscú invadiera Ucrania el 24 de febrero.