Pérdidas sin cuantificar dejó entre los comerciantes y la población la suspensión por más de 20 horas del servicio de energía eléctrica en las comunidades de la Península de Atasta, derivado del intento de robo del cable de cobre que se encuentra adosado al Puente Zacatal.

 

Así lo indicó Verónica Velázquez Muñoz, presidenta de la organización Ciudadanos en Contra de la Corrupción, A.C., al exponer que estas afectaciones son un golpe para su desgastada economía, sin que exista nadie que se haga responsable.

“De acuerdo con la información que tenemos, los primeros intentos de robo del cableado de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) que se encuentra adosado al Puente Zacatal se tiene registrado en el 2018, desde entonces, en diversas ocasiones se ha tenido el mismo problema”.

 

Y destacó que mientras los delincuentes obtienen ganancias por el cobre que venden, los ciudadanos pagan por su fechoría, lacerando la economía de las familias de la Península de Atasta.

 

Personal de la CFE dio a conocer que derivado del intento de robo del cable de cobre adosado al Puente Zacatal, cerca de la medianoche del viernes, y cuya reparación se prolongó hasta aproximadamente las 20:05 horas del sábado, se afectó por más de 20 horas a cerca de 19 mil usuarios.

 

“Por la información que nos proporcionan los comerciantes y la población en general, se estima que se tuvieron pérdidas millonarias, por lo que se pide a las autoridades una mayor vigilancia en la zona, así como el trabajo de investigación para dar con los responsables”.

Velázquez Muñoz recordó que el robo de cable de la CFE se ha vuelto un acto recurrente, no sólo en la zona del Puente Zacatal, sino también en las comunidades de la Península de Atasta, ya que los delincuentes aprovechan los momentos en que el suministro de energía se suspende para desmantelar parte de la red de electricidad.

“Los habitantes de la Península de Atasta, además de padecer los bajones de energía y voltaje, ahora se ven afectados por los constantes robos de cableado”, concluyó.